Entre las dos guerras mundiales, numerosas armadas llevaron a cabo programas para desarrollar flotillas de lanchas torpederas a motor capaces de llevar a cabo misiones de patrulla y ataque. En comparación con la Primera Guerra Mundial, las nuevas tecnologías de motores garantizaban un mayor rendimiento y una mayor eficiencia operativa. Durante la década de 1930, la Kriegsmarine alemana desarrolló los famosos torpederos a motor de la clase S. Entre 1939 y 1940 se construyó la serie S-26, reconocible por un castillo de proa integrado con los dos tubos lanzatorpedos de 533 mm. La solución estética del arco también se mantendrá y mejorará para versiones posteriores. Entre los Schnellboote más famosos podemos recordar los que pertenecieron a la versión S-38. Producidos en casi 100 unidades, tenían una eslora de 35 metros y un desplazamiento a plena carga de más de 100 toneladas. Gracias a los motores Daimler Benz de 12 cilindros, pudo alcanzar una velocidad máxima de 39,5 nudos.
Kit de plástico escala 1/35.
Medida: 99.9cm.
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